sábado, 5 de abril de 2025

Neil Diamond



Ignacio Ruiz Quintano

Abc Cultural


Con Neil Diamond le ocurría a uno lo que con todos los trovadores: sólo se los aguanta si se está enamorado. Fuera de ese estado de estupidez generalizado, en cuanto uno oye al trovador, echa agua por el balcón y el trovador se va a hacer gárgaras. ¿Qué quieren ustedes, si no, que haga un trovador?


Hace tanto tiempo que Neil Diamond se fue de mi balcón que, en el fondo, ya lo daba por muerto, pero muerto de la muerte que decía Ruano, es decir, de la muerte que no es un muerto, sino unos cuantos detalles de la vida. Hasta que el otro día Neil Diamond salió en los periódicos revelando nada menos que la identidad de su dulce Carolina, Carolina Kennedy, la hermana del pobre John John, e hija, por cierto, del peor presidente de los Estados Unidos de América, aunque a palos por el título con Carter y Clinton, pues la bondad de un presidente de los Estados Unidos es, como se sabe, directamente proporcional a la animadversión que su nombre suscite entre los enemigos de América.


Carolina Kennedy ha cumplido cincuenta años.


Tener presencias de más de medio siglo es como medio vivir entre sombras.


¿Cuántos medios siglos habrá cumplido la Carolina de Fórmula V? ¿Y la Eloise de Barry Ryan? ¿Y la Cinderella de Paul Anka? ¿Y la María Isabel de Los Payos? ¿Y la Cecilia de Simon y Garfunkel? ¿Y la Rata de Dos Patas de Paquita la del Barrio? Por no hablar, ay, del Manuel de Adamo.


La escribí en tiempos de Franco –ha sido la última justificación de Adamo–: conocí a un periodista que había estado en la cárcel por sus escritos, y eso me impresionó. Y no se llamaba Manuel.


¿Un periodista que no se llamaba Manuel y que estuvo en la cárcel por sus escritos, lo cual, luego, impresionó a Adamo?


Neil Diamond, desde luego, es otra cosa. Lo más alto que alcanzó su protesta fue Jonathan Livingston Seagull, que en España bien podría ser el himno del nuevo Partido Popular. Y consuela que su dulce Carolina no sea Chelsea Clinton. Pero Neil Diamond, que siempre lo llevó como lo lleva ahora Aznar, ha perdido el pelo. (Se dice que el otro día, en un mitin, Aznar, el de la melena de león, y su señora, que, para la ocasión, tiene algo de Barbra Streisand, hicieron un “remake” en plan bodas de oro del “You Don't Bring Me Flowers” con que tantos matrimonios han amenizado sus largas –o “luengas”, como prefieren decir los trovadores, ellos sabrán por qué– noches de sábado.) Y, sin pelo, no hay trovador que valga.

José Manuel Belmonte. Abuelo y Niño en San Basilio

 


Abuelo y Niño en San Basilio

FJGI

Sábado, 5 de Abril

 


Valle de Esteban

Autorretrato

viernes, 4 de abril de 2025

La guerra de los Rosie





Ignacio Ruiz Quintano

Abc


Ursula von der Leyen, Rosie, nos quiere listos para su guerra: una lata de melva en escabeche y un spray de yodo “por si la nuclear” es el kit de supervivencia más recomendado. La prueba de que la cosa va en serio es que el gobierno de Madrid les ha subido a los soldados doscientos euros la paga, mientras los putinejos Otegui y Puigdemont, el verdadero gobierno de España dirigido, al parecer, desde Moscú, se reúnen en Waterloo, a veinte minutos de la sede central de la Otan, para repartirse la soberanía española, lo cual, al decir de los liberalios, ya no es ni iliberal ni distópico, pues nuestra Patria ya no es España, sino la Unión Europea de Rosie, un monstruo horaciano de dos patas: el “Estado de Derecho”, pleonasmo que nada (bueno) significa, y “Estado del Bienestar”, un invento decimonónico de Bismark en Alemania, seguido por Inglaterra con el “Presupuesto Popular” de Lloyd George (un frívolo Boy George liberalio) y por Estados Unidos con el Roosevelt del Gran Giro. En resumen: una granja socialdemócrata, o lo que los liberalios con segunda vivienda en los Sudetes llaman “El Orden de 1945”. En definición de Jean Clair: “Comemos, dormimos como animales en una granja próspera y bien surtida: comer y dormir, sexo: ¡la granja de Occidente!”


Tenga usted, buen hombre: doscientos “leuros”, y a morir en Rusia por Bismarck, por Lloyd George y por Roosevelt. Gobierno de España.


Bueno, y por Lenin, que inventó el término “Estados Unidos de Europa”. Parafraseando al capitán Diego de Acuña en el remate del segundo acto de “En Flandes se ha puesto el sol”, de Marquina: “¡Quien al oír un viva Uropa con un viva no responde, si es hombre no es uropeo, y si es uropeo, no es hombre!”


Mas para los Rosie, esos liberalios de pelazo en pecho que saben de la guerra no por Carl von Clausewitz, sino por Ramón Tosas Fuentes, Ivà (“Historias de la puta mili”), la cruzada de Rusia no es un cálculo sentimental, sino económico: la comisión correspondiente a Ochocientos Mil Millones de Euros, aparte la lata de melva en escabeche y el spray de yodo “por si la nuclear”.


¿A que no saben ustedes escribir un millón con nueves? –preguntaba en el “Pombo” de Ramón un personaje de la generación del 88. Y escribía: “999.999 9/9”.


Los otros números ya los echó en su día en el Senado americano el general Gavin: “En una guerra nuclear, los cálculos corrientes en muertos llegan hasta cifras de varios centenares de millones, dependiendo de la dirección en que soplase el viento”. Sólo en la América de entonces, el primer día, sobre 150 millones, morirían 36. Cifras rematadas por el sarcasmo de Bertrand Russell: “Una ‘victoria’, a condición de que el número de muertos rusos fuese todavía mayor”.


Esperamos el tiro de gracia europeo –avisó Muray–. Ya no debería tardar demasiado. Nada de “bienestar individual”. La inminencia de la Europa Unida será el ahora o nunca para desterrar nuestros últimos “vicios privados”.


[Viernes, 28 de Marzo] 

José Manuel Belmonte. Bestiario

 


Camarlengo


Eva



Octopussy



FJGI

Viernes, 4 de Abril

 


Valle de Esteban

Puesta de largo

jueves, 3 de abril de 2025

Leguleyos, chirigoteros y la Copa



Francisco Javier Gómez Izquierdo 


                No hay semana en la que no falten chirigoteros inventando coplas a la Constitución, a las Leyes o los Reglamentos, y así con tanta chirigota, al final resulta que todo el año es Carnaval y no sólo los gaditanos sino legiones de andaluces, mi chico sin ir más lejos, ponen en el coche coplas del Selu, el Aragón o el Manolito Santander. La mujer que más manda en España, andaluza por cierto, chirigotea con boca de asno, "asna" en parla de su colega Doña Carmen Calvo, sobre uno de los más sagrados principios del Derecho. La Ley Orgánica General Penitenciaria se retuerce hasta hacerse incomprensible para los que estuvimos sujetos a su ordenamiento y el Reglamento que han puesto los barandas del Fútbol para sujetar a los clubes que se endeudaban sin conocimiento, no es el mismo para el Burgos -descendido por 30.000 euros- que para este Barça de don Laporta, inventor de palancas y subterfugios tan raros como documentar la venta de "amotillos" a precio de BMW, o cosa parecida. Con tanto lío en las inscripciones no estoy ya seguro si Dani Olmo se inscribió por la grave lesión de Christiansen o al final se acogió a algún otro recoveco de querulante. Se liberaba la ficha, pero ¿se quedaba Christiansen sin cobrar? Ahora dice la Liga que Dani Olmo no puede seguir inscrito, pero ¿quién paga al futbolista? Que se puede ir libre a otro equipo, dicen. Pues veremos, porque Don Laporta dice que ahora que están que no hay quién los pare, salen ataques malintencionados contra el Barça. Como Don Laporta no habla como los gansos, veremos cómo resuelven el caso los barandas de la Liga ó mejor... la mujer y el hombre que más mandan en España que tienen en el Consejo Superior de Deportes a un sindicalista de los futbolistas: "los deportistas profesionales tienen derecho a una carrera deportiva conforme a sus potencialidades.." . Así dictó el CSD para garantizar la inscripción de Dani Olmo y Pau Víctor en enero.


      Don Laporta dice verdad cuando habla del juego del Barça. A servidor no le convence la defensa tan adelantada, pero el equipo está muy bien engrasado para la función de "presión tras pérdida", los futbolistas son precisos en el pase, dotados de excelente técnica todos ellos; muchos de sus movimientos responden a automatismos ensayados quizás hasta el aburrimiento; arriba tienen un depredador insaciable como Lewandosky y un jugador, Ferrán, que busca el espacio como muy pocos. La clasificación para la final de Copa llegó así, con un pase al espacio del clarividente Lamine Yamal donde tendría que aparecer Ferrán... y apareció. Gol y a aguantar el bregar colchonero. Un bregar que cada vez resulta más monótono y previsible. Un bregar con excesivo ímpetu al que le falta poderío.


     El poderío lo tiene el Madrid. No juega bien, sus movimientos parecen en ocasiones adormecidos, se le ve aparatosa debilidad en los costados defensivos y hasta los centrales se aturullan sin explicación aparente... pero arriba tiene poderío. Vinicius, Mbbapé, Rodrygo, Bellingham... muchos partidos no lo sacan a pasear o tardan en hacerlo, pero cuando les salta la chispa te electrocutan. La Real Sociedad, tras un gran partido, cayó en la semifinal por tres chispazos de Vinicius, asistente de dos goles sensacionales: el de Endrick y el de Bellingham. Vinicius pareció ausente casi todo el partido, hasta el punto de cabrear al banquillo que veía que la Real amenazaba con disgusto morrocotudo, pero ¡ay!, el poderío se tiene o no se tiene y si se tiene en el fútbol, cualquier cosa puede pasar durante 90 minutos... o 120.


       De todos modos, que el Madrid y el Barça ganen, cree uno que es casi obligatorio. 

Negrín



Ignacio Ruiz Quintano

Abc Cultural


Al amparo de la Ley de Alzehimer Progresista en virtud de la cual por el mar corren las liebres y por el monte las sardinas, la ministra egabrense Calvo, la concejala madrileña Moreno y el burócrata sevillano Guerra han acometido el enfoscado y revoque de la fachada de un mito del progreso español, Negrín, al que sus propios correligionarios describieron voceando “¡A beber! ¡A beber!”, no al salir del vientre de su madre, como el tierno Gargantúa, sino al salir del país con el saco del oro de Moscú. “¡Un patriota!”, ha sentenciado el Guerra, que hubiera dicho lo mismo de Vera. Con las cosas en este punto, ¿a quién haremos caso, a Azaña, a Prieto o al Guerra?


No se puede hablar mal de un camarada como Negrín –solían decir los camaradas de Negrín–. Es un camarada excelente que ha demostrado mil veces su amor a la causa. ¡Está casado con una rusa!


Julio Camba sostuvo que todo el éxito político, y gran parte del universitario, de Negrín derivaba de su matrimonio, pues, en cuanto se casó con la rusa, la gente comenzó a decir que Negrín sabía el ruso, y un hombre que sabía ruso podía anonadar a cualquier tribunal de oposiciones con esas citas de carácter incontrolable que en nuestro lenguaje vulgar se llaman camelos.


Por mi parte –escribe Camba–, yo, que le he oído hablar con su mujer, no niego que Negrín sepa algo de ruso. Sabe, desde luego, decir “caran d’ache” (lápiz), “papirose” (pitillo), “nitchevó” (no importa), “novoie uremia” (los tiempos nuevos), “Dostoievski” (Dostoievski), “mujik” (mujik), “balalaika” (balalaika) y algunas otras palabras más... En conjunto, unas dos o tres docenas, lo que ya es bastante para manejarse en los barrios obreros de Madrid, pero lo que a todas luces resultaría algo escaso para desenvolverse en Rusia. ¡Negrín, hombre tropical y de pelo rizoso que, al aliarse con la gélida Rusia por vía matrimonial, se preparó la jefatura del Gobierno de Valencia!... Cuando yo lo veía en aquella “Editorial España” que habían fundado él, Araquistáin y Vayo para cubrir con el producto de las obras ajenas el déficit de las propias, estaba ciertamente muy lejos de augurarle tanto porvenir...


Menos risueños son los recuerdos que de Negrín dejaron Prieto y Azaña, que puso en su boca la siguiente confesión: “Y si esas gentes van a descuartizar a España, prefiero a Franco. Con Franco ya nos entenderíamos nosotros, o nuestros hijos, pero estos hombres [catalanes y vascos] son inaguantables.” Lo dicho (por el Guerra): “¡Un patriota!” Pero también, no lo olvidemos, un político (cenaba tres veces) y un científico (se tomaba por tubos las aspirinas).

José Manuel Belmonte. Plaza Juan Bernier



Plaza Juan Bernier
FJGI

Jueves, 3 de Abril

 


Sangre de toro

miércoles, 2 de abril de 2025

Hughes. Real Madrid, 4; Real Sociedad, 4. Virutas de optimismo en el carajal


@realmadrid


Hughes

Pura Golosina Deportiva


Pude ver muy tarde y en condición bostezante el partido contra la Real. Sin orden (como si me entrenara Ancelotti) dejaré algunas impresiones.


Tampoco sería tan crítico con don Carletto. Al fin, vimos los habituales problemas estructurales, pero acrecentados por el momento, un partido después del parón de selecciones, de Copa además (aire destemplado característico), en el que nadie, ni futbolistas ni aficionados, estaba del todo apasionado por la idea de pasar. El calendario invita a ver la final de Copa como una trampa, la enésima, al Madrid europeo.


Los jugadores no estaban, algunos medio estaban, y otros acabaron estando; en conjunto, no me pareció tan mal.


Por ejemplo, el partido sirvió para conectar a Vinicius, que andaba un poco despistado. Acabó siendo la fuerza devastadora que sólo recibe errores arbitrales, invitaciones al traumatismo, asombro reticente (los oh del que le critica) y volvió a estorbarse con Mbappé, al que sabiamente ha decidido ceder el paso en el ascensor.


Un querido amigo, con el natural ventajismo del aficionado, me escribió para recordarme que Camavinga no es lateral izquierdo. Y yo, pensando en el partido, y considerando que hasta pudo ser expulsado, dentro de lo malo no lo vi tan mal. En la primera parte contuvo a Kubo. En la segunda, con Vini desatado y el desparrame general, Camavinga quedó muy solo y muy ido. Sigo pensando que puede ser una opción en partidos de concentración alta. Con Valverde de lateral derecho y Ceballos-Tchouaméni en el medio, si Mendy falla o hay que revolucionar, sigo viendo esa opción como plus ultra erótico festivo. El una vez definitivo de la Marvel Flo.


Scholes contó una vez que los laterales que se metían en el centro del campo eran un insulto al centrocampista, que debía gritarles: ¡fuera de aquí! Pero si el que llega es un mediocampista total, ¿qué diría Scholes?


No 'me bajo' de Camavinga. Camavinga estaba muy bien antes del parón . Jugó minutos buenísimos de gran concentración y el insoportable paréntesis de las selecciones y esta verbena copera lo han sacado del sitio. Pero aquí prefiero mirar la tendencia: el Camavinga de la primera parte y el Camavinga pivote antes del dichoso parón.


Y si miramos así lo de ayer, vemos que Güler aprovechó para responder a una pregunta antigua. Todo el partido puede verse como un accidente (un tremendo caos ancelottistico) para que Vinicius se enchufara a la corriente y para que Güler apareciera en la media, eso que esperábamos ocurriera en algún momento aislado tras la lesión (importantísima) de Ceballos.


Ya contra el Leganés, Güler jugó distinto : aseguró el pase, pases que sin ser malos contenían otra meditación. Eran pases que sumaban valor, pero planteados desde un punto de vista distinto. Con todo, provocó un penalti (o penaltito). Y ayer, contra la Real, acabó siendo mediocampista, casi mediocentro, moviendo al Madrid de banda a banda. Él sacó el córner del gol de Rudiger. Así que fue un poco Kroos.


Apareció el Güler mediocampista, asomó un Güler posible, pues así, completando su juego, adensándolo, madurándolo, tendiendo al mediocampismo, Güler tiene más futuro en el Madrid.


Estas son impresiones optimistas. ¿Por qué este optimismo? Hay algo en este Madrid cogido con alfileres de Ancelotti que, como un subtexto o como un bajo casi inaudible, habla de evolución. De idea que se toma y se retoma pero que está.


Me asomo al caballete del viejo pintor y... yo veo un paisaje aún.


Habría más que decir, pero otro día. Tanta prórroga quita mucho tiempo. Si sumamos las horas que al final de un año pasamos con Carlos Martínez y Juan Carlos Rivero, sentiríamos muy cerca la tentación del suicidio. 

Muñoz



Ignacio Ruiz Quintano

Abc Cultural


Fruto seguramente de su dirección del Cervantes de Nueva York, Muñoz Molina deja caer en sus artículos explicaciones en inglés, aunque confunda frases del Oso Yogui con ocurrencias del beisbolista Yogi Berra, cuya esposa, Carmen, le dijo un día: “Yogi, tú eres de St. Louis, vivimos en Nueva Jersey y juegas al béisbol en Nueva York. Si te fueras antes que yo, ¿dónde te gustaría que te enterraran?”


¡Sorpréndeme! –respondió Yogi.


Muñoz Molina, el novelista que escribió “cenamos opíparamente”, para guasa de Umbral, vive en plena manía adolescente de sorprender con descubrimientos. Primero descubrió que Ruano era un “escritor fascista” –de ese fascismo pequeño burgués que consiste en no estar en casa cuando los milicianos vienen a buscarte para rebanarte el pescuezo–, y ahora, que Fitzgerald la tenía pequeña:


Es embarazoso asistir a tanta novelería narcisista y masculina, la autenticidad del gran machote cazador y bebedor que deja en ridícula evidencia a los que no le llegan a su altura, especialmente al pobre Scott Fitzgerald, que no sólo estaba fascinado por los ricos, como un papanatas, sino que además la tenía muy pequeña.


Habla de Hemingway, y su alusión a los ricos convierte a Muñoz Molina en epígono de aquel Martínez Sierra que declaraba a Alberto Guillén: “Yo me renuevo constantemente. Soy bolchevique, en efecto. Y estoy al tanto de todas las novedades, tanto sociales como literarias...” En cambio, su alusión al tamaño nos lo reduce a la cotilla señalada por Javier Krahe en los ripios de “Un burdo rumor”, que arranca: “No sé tus escalas, por lo tanto eres muy dueña / de ir por ahí diciendo que la tengo muy pequeña...”


Al hilo de esa envidia de pene que lleva a Fitzgerald a admirar a los ricos, Alfredo Valenzuela remitió una carta –que, por supuesto no se publicó– al periódico global en español para aclarar que, si Fitzgerald “la tenía muy pequeña”, era porque de ello lo acusaba su esposa Zelda (cuando las mujeres podían ser malas, no como ahora, que lo impide Bibiana, esa Hipatia de Gades) y no Hemingway, quien, por el contrario, lo convenció de que “la tenía perfectamente normal”.


La anotomía es el destino, podríamos decir glosando una frase de Napoleón –escribe Freud en “La disolución del complejo de Edipo”, donde expone su conjetura fascinante (fascinar: atraer y repeler a la vez) sobre la diferencia entre los sexos.

José Manuel Belmonte. Fuente en Colón

 


Fuente en Colón

 frente al palacio de la Merced

FJGI

Miércoles, 2 de Abril

 


El medio ambiente del consejero Novillo

martes, 1 de abril de 2025

El espectáculo alemán


Kaja

Ignacio Ruiz Quintano

Abc


En el último siglo, Alemania invadió Francia y Rusia, adonde enviaran a Lenin para el experimento bolchevique. Antes, Kant nos dio un pleonasmo, “Estado de Derecho”, que se ha convertido en el sonajero de los tontos, los mismos que ahora quieren volver a Rusia “para trocearla”, como pide la princesa Kaja, que tiene a la bumerada liberalia bailando como en un OnlyFans.


Sólo luchamos por lo nuestro… Nos obligan por ley a ser bondadosos… Nadie prevé si nuestra no violencia sólo está retardando la guerra hasta nuestros hijos… Deberíamos revisar qué hay de sincero y autónomo en la propia tolerancia… Nuestros intelectuales son amables con el extranjero no por amor al extranjero, sino por furia contra lo nuestro, y acogen con satisfacción todo lo que lo destruye… –avisó Botho Strauss en “El canto creciente del macho cabrío”.


En lo que prepara los tanques, Alemania se entretiene rizando el rizo con lo que llama Constitución y que sólo es la Ley Fundamental de Bonn, redactada bajo vigilancia de un ejército de ocupación por un nazi “patanegra”, Theodor Maunz, maestro de nuestro Sánchez Agesta, que, menos para separar los poderes, único objeto de una Constitución, sirve para todo: prohibir los partidos nazi y comunista, volver a permitir el partido comunista, prohibir el exceso de deuda, volver a permitir el exceso de deuda, usando las mayorías parlamentarias a conveniencia (birlibirloque de Merz, exempleado de BlackRock), y ya veremos la de cosas que hará el sanchismo cuando descubra el estilo alemán de valerse de la mayoría felipista del 82, con sus 202 diputados, que le dan para hacer de Bolaños, ese tipo que tutea al Santísimo, un papa Clemente del Valle de los Caídos. Después de todo, nuestra Carta otorgada del 78 es una copia burda de la Ley Fundamental alemana. España con Franco tenía ocho; un verano, Garrigues, desde Roma, y desde Madrid Jesús Fueyo, Fernando Herrero y Emilio Romero escribieron a Franco a San Sebastián con la proposición de reunirlas en una Constitución, pero el general debía de tener la idea griega de que “todas las cosas son ocho”, y tiró las cartas al Urumea. 


Semel iussit, semper paret


Una vez ordenado, siempre obedecido. El legislador y la dictadura. La ley es dictado, primero “dictamen rationis”, después “voluntatis”, a continuación “concupiscentiae”. Toda ley es dictado. Lo dice el creador de la ciencia constitucional, con la sabiduría de la experiencia. “Hoy día: fe en la ley = falta de instinto de la criatura condenada al hundimiento. Quizá sea el derecho de Estado la materia de la jurisprudencia y no la ley”.


Usualmente –anota Nicolás R. Rico, bastante antes del sanchismo–, en España todo el segundo curso de Derecho Constitucional se reserva para lo que vaga y pomposamente se llama “Derecho Constitucional Comparado”. Se trata de una enseñanza en gran parte imaginaria, donde reina supremo el “quiproquo”. No hay mucho que comparar, si somos sinceros.


Seguimos avanzando.


[Martes, 25 de Marzo] 

José Manuel Belmonte. Puerta del Rincón

 


Puerta del Rincón

FJGI

Martes, 1 de Abril

 


Sueño madrileño

lunes, 31 de marzo de 2025

La Segunda. Jornada 33

     


Juan Gutiérrez, cuando jugaba en el Ceuta
 

Francisco Javier Gómez Izquierdo


          No hay jornada en Segunda División que salga de relleno. Todas suenan a trascendentales y a finales de mayo cuando llegue la 42, las distintas hinchadas recordarán en la que fueron destacados protagonistas. Sí. La Liga parece obra de teatro del Siglo de Oro, cuando a los actos llamaban jornadas y en la última se juntaba el gozo y la tragedia con el honor de por medio. En esta 33, el Rácing de Santander ha representado el papel que le corresponde de modo aseado y sin excesos. Se ha visto ayudado por el preocupante declive de un Zaragoza al que el aficionado veterano no le gustaría ver en los barrancos de la irrelevancia pero ha sumado tres puntos, lo mismo que el Almería al que sigo considerando la mejor plantilla pero con un entrenador con manías arbolarias. El Almería ha podido con el Levante, que no es enemigo menor, pero lo ha hecho con uno de esos penaltis que por ejemplo en El Arcángel no lo pitan a favor del Córdoba. Sigo creyendo que éstos son los dos mejores equipos de Segunda junto con el Elche, con peor plantilla, pero con un entrenador que es capaz de trabajar la táctica y las mañas uruguayas con nota de sobresaliente. El Elche fue el galán-estrella de la jornada. Ganó en Córdoba porque los de Iván Ania no acertaron a marcar sus muchas ocasiones, porque al portero Dituro le salió de cara el día, pero sobre todo porque Eder Sarabia se trabajó el contraataque y sabedor del bajón físico que acostumbran los laterales blanquiverdes y la incorregible manía cordobesa de defender muy arriba, sacó, a falta de un cuarto de hora, velocidad. Carrera de Josán y remate a gol de Rashani, un sueco-kosovar del que se sabe que ha jugado en Noruega, Turquía y Francia... y fichado este verano, algún ratito en el Elche. Gol en el minuto 88. Suerte, sí. La que se precisa para lo que los ilicitanos ansían. Fortuna mayor acudió en favor de Huesca, gol del triunfo ante el Spórting en el minuto 94. Mismo minuto en el que Manu Molina remató de manera espectacular contra su propia portería para que el Oviedo, en el debut de Paunovic en el banquillo, ganara a un Málaga que mereció no sólo un punto, sino los tres.

     ¿Y el Mirandés? Tuvo el 2-3 en el Carlos Belmonte ante el Albacete... en el minuto 96, pero en el 97, Juan Gutiérrez, al que llaman "el Conan de Comillas", reventado por el esfuerzo pero con corazón para ir a por el gol, dejó un balón a merced de Pablo -un error no forzado que dicen en el tenis, un error que no se puede tener en semejante minuto- y éste se la puso al murciano Higinio para el 3-2. Derrota cruel, dice el Diario de Burgos. Morir así en la jornada 42 sería mas tragedia griega de teatro de Almagro.

     Burgos y Córdoba están colocados en tierra de nadie. De entremés. Entremés infumable que servidor no vio en Elda donde el Burgos empató. Y entretenido el de El Arcángel, donde se vió un buen partido. Disputado, táctico. Mereció mas el Córdoba, pero Eder Sarabia usó de táctica más provechosa que Iván Ania. Eder Sarabia tenía estudiado al Córdoba cosa en la que uno cree, no había correspondencia con Iván Ania. La subida del ilicitano Diaby es parable y hace vulnerable al Elche. No se le paró nunca. La entrada de Josán y Agustín Álvarez quiere decir algo. El entrenador cordobés pareció no darse por enterado.

     Bueno, viviremos el final de temporada con la tranquilidad que no hemos tenido estos últimos años. 

Y al séptimo día descansó



Ignacio Ruiz Quintano

Abc


Al acabar la obra que hizo, que fue crear la luz, las montañas, los mares, el sol, la luna y las estrellas, la vida vegetal y animal y, finalmente, la humanidad, incluso Dios, según el Génesis, reposó, cosa que los futbolistas del Real Madrid no podrán hacer este año ni el que viene, pues del Mundial de clubes irán, tarde, a la Liga, a la Champions y al Mundial de selecciones nacionales, y a ver cómo Pintus ata esa mosca por el rabo. En el peor de los casos, que todo se perdiera y hubiera que prescindir de Ancelotti, no se podría, por la imprudencia que supone cambiar de caballo en mitad del río.


No volveremos a jugar con menos de 72 horas de descanso –dijo Ancelotti tras el reventón físico del equipo en Villarreal.


Uno de los Palpatines del Régimen aprovechó la declaración para acusar a Ancelotti de convertirse en un “Mourinho 2.0” para desarrollar “una estrategia de mala fe trazada para desprestigiar el campeonato nacional”. Son los mismos Palpatines que, para no decir España, llaman “la Roja” al Combinado Autonómico, y que niegan la condición de nación a España porque la única patria que hay, porque a las logias les sale de los dídimos, es la Uropa creada en su día por la Fundación Ford. En resumidas cuentas: no hay más patria que Uropa ni más nación que la Liga que un día pastoreó Negreira, una competición tan seria que no paró el 11M (¡cómo olvidar el rubalcabesco agit-prop radiofónico durante aquel Real Madrid-Zaragoza del sábado, 13 en el Bernabéu!), pero tan humanitaria que suspende un partido por defunción del médico de uno de los clubes.


La importancia del descanso se notó a raíz de la eliminatoria europea Atlético-Real con prórroga en el Estadio Riyadh Air Metropolitano: el Barcelona le remontó al Atlético un 2-0 con autogol de Reinildo convertido en gol mítico del nuevo Oliver Twist del Relato, que tituló como si Franco hubiera pescado el “campanu”: “Un talento único, un jugador diferencial: así ganó Lamine Yamal el partido en el 93. La estrella del Barcelona se sacó un latigazo desde lejos cuando el partido parecía que estaba destinado a repartir un punto para ambos equipos”. Esta invocación no la mejora Machado en su canto “A Líster, jefe en los ejércitos del Ebro”, con el tremendo terceto “de monte a mar, esta palabra mía: / ‘Si mi pluma valiera tu pistola / de capitán, contento moriría’”, que da a entender que la batalla del Ebro la ganó el pobre cantero gallego.


El Atlético renovó su leyenda de Pupas en una semana que le privó del doblete Champions-Liga con dos jugadas agónicas de doble toque: el gol del 93 con toque de Lamine y de Reinildo en Liga, y el “julipenal” por resbalón de Julián Álvarez en la tanda de penaltis en Champions, apostrofado por un cómico del arbitraje, Iturralde, que aplica al golpeo de Álvarez la doctrina del simultaneísmo, ismo inventado por Delaunay y popularizado por Apollinaire, el poeta que quiso lanzar, sin éxito, un “arte del tacto”, y que escribió: “Arrojando su tinta al cielo, / sorbiendo la sangre de aquél a quien ama, / y encontrándola deliciosa, / este monstruo inhumano soy yo mismo”, muestra de un talento literario muy superior al de Iturralde, que posee el secreto para evitar la infracción en el lanzamiento de penalti: golpear el balón con los dos pies a la vez, como en las carreras de sacos.


La llamada “competición nacional”, ésa que Ancelotti trataría de “desprestigiar” exigiendo un descanso mínimo de 72 horas, parece definitivamente pastoreada (Barcelona, Real y Atlético), y bien haría el Madrid en no dejarse más pelos en semejante gatera, aunque a Mbappé no se le caiga de la boca el triplete. Y lo que vale para la Liga, vale para la Copa, donde tiene la excusa perfecta (descanso mínimo de 72 horas) para evitar la mosca en la sopa europea que supondría nada menos que un derbi o un clásico en una final colocada entre eliminatorias de Champions.


Champions, Mundial y que no nos coloquen a Zubimendi por Vitinha.


[Sábado, 22 de Marzo] 

Primera novillada de la temporada. Un natural de Diego Bastos. Márquez & Moore


Ricardo Gallardo


JOSÉ RAMÓN MÁRQUEZ


Primera novillada de la temporada en Las Ventas y ¿para qué ir más lejos?, con una novillada de Fuente Ymbro, primera de las muchas veces que veremos este año anunciada esta vacada en la Monumental. Ahora que tenemos a Fuente Ymbro escalando hacia el podio de las «corridas toristas», especialmente a raíz de aquella interesante corrida con la que se despidió de la afición en octubre del año pasado, teníamos puestas nuestras esperanzas en la cosa ganadera, a ver lo que salía. Y lo que salió fue una escalera, desde el segundo, Jalado, número 101, que tenía cuajo, seriedad y hechuras de toro, hasta el lavado tercero, Guardés, número 71, que tenía cara de tonto y proclamaba ciertamente su condición novillil. De fuerzas ninguno salió en plan Sansón y de comportamiento a veces sacaron cierta nobleza, a veces aspereza y, en general la cosa quedó más bien deslucida.


Para despachar las seis prendas que mandó don Ricardo Gallardo desde San José del Valle, las mentes pensantes de la empresa Plaza1 contrataron a Diego Bastos, ya conocido de la cátedra, junto al mairenero Luis Alejandro Mariscal Ruiz y al toluqueño Emiliano Osornio.


Con muchas salvedades el que más apuntó fue Diego Bastos, que en sus irregulares trasteos pareció querer mandar al tendido el mensaje de que él estaba por el toreo caro, el de caer hacia adelante, el de meterse en el viaje. Haciendo eso, por estar en el sitio, consiguió cobrar una cornadita de diez centímetros que le dio el primer novillo como quien no quiere la cosa, con la que le mandó a la enfermería a que le compusieran para volver a salir en el cuarto a aprovechar las embestidas sueltas que le ofreció Mestizo, número 69, y entre medias dejar un espléndido natural que es el único toreo bueno y hondo que se ha visto en esta tarde en la Plaza. Mal con la espada en su primero y mal con la espada en su segundo, deja ganas de que le repitan, por lo que ha apuntado, más que por lo que ha hecho.


Las gentes soltaron sus aplausos para Mariscal Ruiz con sus arrimones y esas cosas tan feas de tirar la ayuda y la muleta a la primera de cambio. Recordemos que este muchacho procede de ese centro de mixtificación taurina llamado «Escuela de Tauromaquia Fundación El Juli» de Arganda del Rey, y que esa losa que lleva sobre sus espaldas es tremenda, pues para ponerse en el camino del toreo verdadero lo primero que debe hacer es olvidar todo lo que le enseñaron. En ese sentido, planteó la típica cosa contemporánea triste y aburrida del cite por las afueras, la ventaja, el toreo con el pico y demás añagazas. El hombre tiró de raza para suplir sus carencias y con ese desgarro y la voltereta se llevó de calle a los más impresionables, pero el conjunto de su actuación no apunta en ninguna dirección buena.


Y el mejicano Emiliano Osornio nos deleitó con una fantasía de delantales rematados con una airosa revolera, un soplo de aire fresco frente a las verónicas de pegolete de los otros dos y mostró su oficio y su temple, si bien nunca osó traspasar la línea donde el toreo se hace grande y prefirió quedarse al hilo del pitón por lo que pudiera pasar. A su primero lo mató metiendo el estoque de manera habilidosa, como a capón, y a su segundo lo pinchó primeramente y después le dejó una estocada entera y efectiva.


Poco dio de si la tarde, pero dejemos anotados un par de banderillas de Iván García y su excelente brega. De los picadores, mejor ni hablar. La Presidencia ni se notó que estuviera, que es el mejor elogio que se le puede hacer a don Víctor Oliver.



Diego Bastos


ANDREW MOORE







FIN

José Manuel Belmonte. Jaque mate

 


Jaque mate

FJGI

Lunes, 31 de Marzo

 


Casa Marcial

domingo, 30 de marzo de 2025

Hughes. Real Madrid, 3; Leganés, 2. Victoria rodeada de bodrio

@realmadrid

Hughes

Pura Golosina Deportiva

 
Tremendo bodrio fue. Se notaba muchísimo el parón de selecciones. El bajón de selecciones. De repente, aunque se hubiera pensado en fútbol estos días, el fútbol no apetecía.

Nos dejamos unas semanas solos y empezamos a pensar en otras cosas, en otras personas... De repente, da pereza ponerse.

Les daba pereza hasta a ellos mismos. Daba pereza Bellingham, daba pereza Mbappé... No hablemos de lo que daba Lucas Vázquez.

Los primeros minutos fueron de tedio, de ritmo muy bajo. Caían aplausos para las carreras de Asencio y para una que pegó Güler, que se va haciendo pillo.

Empezaron a entrar en calor sobre el minuto 20. Un par de llegadas y una ocasión ya clara de Mbappé, que parecía el más vivo de piernas.

En curva ascendente se llegó a un penalti sobre Güler, más penalti de Barça que de Madrid, lanzado por Mbappé. Lo hizo de panenka y el portero, Dmitrovic, vio la intención ya tarde; su cuerpo quedó vencido y solo pudo reaccionar con un brazo que se movía como si perteneciera a otra persona, a una persona viva, con la mano girando como en una sevillana.

Pero las mieles de ese gol duraron tan poco... Apenas regresaba Mbappé a la seriedad gestual cuando marcó el Leganés, gol de Diego en una jugada que llegó por la banda izquierda del Madrid. Fran García lo hizo todo: cayó en el engaño de Juan Cruz (no confundir con la criatura cultural prisaica), persiguió inútilmente al extremo y luego habilitó al goleador.

Juan Cruz es el Neymar de Leganés, lleva un pelo inconfundible que parece una apuesta perdida que él ha hecho crónica.

El empate acrecentó las posnaciones de la torrija del Madrid. El tedio se hizo muy sólido. Y de ahí llegó el 1-2, gol de Raba en jugada por la otra banda, la de Lucas, de Asencio en este caso, fácilmente superado en un inexistente "equilibrio defensivo" del Madrid, problema de toda la noche. Costaba regresar quizás porque todos acababan de hacerlo en avión.

La primera parte acabó con una doble ocasión de Mbappé. A su alegría se había sumado la activación de Bellingham, central en la mediapunta, donde por cierto le coloca felizmente Tuchel en Inglaterra, de rey en un 4-2-3-1, sacrificando a Foden o a quien sea.

Nada más volver del descanso, empató. Salió el Madrid en tromba y en una jugada con tres remates marcó Bellingham, autor del primero y del tercero. Entre medias persiguió la pelota como en trance, como una figura detecta la chica en un extremo de la discoteca y se va hacia ella copa en lo alto, sin perder de vista el objetivo...

El Madrid embutía al Leganés y la reducción de espacios hacía feliz a Brahim.

El Madrid había subido una o dos marchas, SÍ, PERO Diego llegó hasta Lunin en otra contra navegable. El Madrid no dejó de ser frágil, muy llegable (valga la expresión que por supuesto vale porque vale todo).

En las alas estaban Brahim y Güler. El primero tiró al palo en el 54. El fútbol se hace con él más ligero y combinativo, contagio a los demás su sinapsis. Hizo posible un par de jugadas de altísima precisión y velocidad.

Güler estuvo discreto (en el sentido de prudente) ya la vez apropiada. Quizás esté entrando por el aro ancelottiano. Poco descaro, pero balones precisos, sin insolencia. Corrección, adecuación a mecanismos generales.

El ataque lo completaba el travelling de Fran García, testigo veloz más que en sí mismo participante.

El empate estimuló algún arranque actoral en el Leganés, la tendencia a la dramaturgia. Los minutos iban pasando y Ancelotti sacaba a los brasileños.

Había tensión de resultado pero esplín de fútbol y Morientes, en la narración, solo decía polisílabas: casuística, cariacontecido...

Valverde observaba en la banda mientras elongaba. Debía de estar pensando "¿tendré que entrar yo?".

El ambiente era raro y había cumbre de Ancelottis. Efectivamente: Valverde, entra.

En el campo, Rudiger intentaba unos tiros muy irritantes, lejanos y frívolos, como excentricidades ramadánicas.

Y por fin llegó el 3-2, de una falta que llegó de robo y cabalgada de Rodrygo, al que estéril con una pierna. Mbappé lanzó y el balón, con rosquita buena, se metió en un hueco de la barrera, mellada de repente como si se le hubiera caído un diente.

Se fue a abrazar a uno de los miembros del staff , inspirador, quizás, de su primer gol de falta.

 

Con el 3-2, Ancelotti sacó a Tchouameni, como si la noche hubiera consistido en ir recomponiendo el equipo hasta acabar enteros.

Aun pasó alguna cosa en ese rato... Vini tuvo una ocasión clara pero le pudo la generosidad con Mbappé. Antes corría solo hacia el gol. Ahora Mbappé le pone en un brete.

Asencio intentó la de Ricardo Rocha y aun sufrió el Madrid con una ocasión de Munir. De una forma menos seria, el Madrid acabó sufriendo, sabiendo sufrir, que se dice, como en el campo del Villarreal.

Esto quien lo borda es Bellingham, que sobresalía en el sacrificio como un Cristo.

 


@realmadrid 

El Cigarrón


Simone de Beauvoir


Ignacio Ruiz Quintano

Abc Cultural


“Sólo hay un bien: el conocimiento. Sólo hay un mal: la ignorancia.” Lo proclamó a voces Carmen Calvo, ministra del gobierno más “malo” que se recuerda, en el concierto/aquelarre de Marilyn Manson en el madrileño Cerro de la Cantueña.


En Barcelona, los celos de una dama de la Esquerra, que declara ser escritora, han llevado al Parlamento catalán a propinarle un “bon cop de falç” al español: los diputados exigen a la Generalidad que excluya de una feria a los escritores en castellano. Al parecer, la dama, que tampoco soporta a Cervantes, se sintió atropellada en una firma de libros del Paseo de Gracia por la cola de Boris Izaguirre, fénix de los ingenios del chavismo rampante.


En Oviedo, la piñata del Príncipe de Asturias de las Letras ha caído sobre la brasileña Nélida Piñón, que según la directora de la Biblioteca Nacional, la que sostiene que Barrabás fue uno de los dos ladrones crucificados con Nuestro Señor, habría conseguido así lo más difícil para las mujeres: “el prestigio oficial”. Otra Príncipe de Asturias, la marroquí Fátima Mernisi, acaba de revelarnos que las mujeres árabes nunca han estado dominadas por el hombre: eso sólo es un invento que forma parte del gran mito del harén.


En su ensayo sobre la vulgaridad, sir Osbert Sitwell incluyó hace cincuenta años las novelas fuertes que ciertas novelistas escribían con el único propósito de demostrar que no se asustaban de nada y que no eran ellas menos fuertes que cualquier macho. A los “novecentistas” como Pérez de Ayala estas señoras les hacían la impresión de la mujer barbuda, que, junto con el circo de las pulgas, solía constituir la atracción mayor en las barracas y toldos de las ferias. A mí, ahora, todas se me hacen Simone de Beauvoir, la viuda negra del gran farsante estrabón y centenario: un ojo al gato del existencialismo y otro al garabato del negocio. Si se puede decir filosofía a la cháchara de Roquentin con su guijarro: “Era una especie de repugnancia dulzona y procedía del guijarro, estoy seguro; pasaba del guijarro a mis manos... una especie de náusea en las manos.” Mejor el cigarrón de la Beauvoir.


Simone de Beauvoir se sintió mujer y artista un día en que se encontró un cigarrón en su jardín: lo apretó en su mano, como el gilipollas de Roquentin al guijarro, y se negó a decir lo que guardaba. Quisieron abrirle los dedos, pero la Beauvoir huyó con su cigarrón –¡su secreto!– por el monte. Fue el día en que se sintió mujer y escritora e importante: porque tenía algo para ella sola.

José Manuel Belmonte. Hombre pájaro

 


Hombre pájaro

FJGI